Las runas – Práctica con la runa Os
Las runas no han sido inventadas por el hombre.
El Maestro Samael explica:
las runas nórdicas pertenecen a la gramática cósmica, al gran verbo universal de vida.
Los signos de esta escritura de la lengua universal no están compuestos arbitrariamente, sino conforme a las fuerzas que actúan en el universo.
Resuenan en la inteligencia viva y armonía de la naturaleza y el Cosmos.
Estas letras y sonidos están dotados de magia y poder.
No resulta extraño que los mantrams (palabras de poder tan apreciadas en Oriente) sean vestigios de este lenguaje sagrado.
Siendo parte del lenguaje original, el conocimiento de las runas sagradas es universal, es tan antiguo como el mundo y pertenece a las grandes escuelas de misterios internos de todas las culturas.
Muchos creen que las runas pertenecen a una lengua muerta o desaparecida, porque, a los ojos profanos, la sabiduría iniciática rúnica desapareció junto con los maestros y sacerdotisas de las escuelas de misterios egipcios, druídicos, nórdicos, etc.
Pero el valor mágico de los signos rúnicos nunca ha desaparecido.
Hoy día, podemos rescatar los valores rúnicos, sus nombres y su profundo y mágico significado. Esto es posible gracias a los vestigios grabados que han quedado en diversos objetos, como lápidas, cuernos, etc.
En el umbral del templo, los aspirantes realizaban múltiples ejercicios de preparación espiritual.
Con estos ejercicios afinaban su cuerpo, glándulas y centros de fuerza o chacras, para sensibilizarse a las fuerzas mágicas y el despertar de la conciencia.
El estudiante debe observar las letras rúnicas y seguir la relación que existe entre ellas y las diversas posiciones del cuerpo humano.
Cada letra es una fuerza potente y responde a cierto signo y posición del cuerpo.
Aunque nosotros no percibiéramos su vibración, ésta existe y se manifiesta.
Las runas poseen fuerzas ocultas y poderes inherentes que se despiertan según se van practicando.
Los ejercicios rúnicos son el judo del espíritu.
Los diferentes ejercicios rúnicos sirven para:
1. el despertar de la conciencia
2. transmutar las energías creadoras
3. preparar el advenimiento del fuego sagrado
4. captar las energías del cosmos
5. acumular átomos crísticos de alto voltaje
6. contactar con la divina madre
7. contactar con los dioses inefables de la naturaleza
8. despertar el juicio interno
9. estimular las glándulas internas
10. etc.
Al colocarnos en esas sacras posiciones e inhalar y exhalar el prana, ciertas “chispas foháticas” se despiertan y estimulan la conciencia.
En los ejercicios rúnicos existe:
• pranayama
• oración
• meditación
• vocalización
• cierta postura sagrada
Durante estas prácticas se combinan en forma armoniosa y rítmica:
• los movimientos
• la respiración
Las runas pueden hacerse a cualquier hora del día, pero, por la mañana temprano, antes incluso de desayunar son una práctica altamente recomendable.
Siempre debemos hacerlas mirando al Oriente, pues el lugar desde donde sale el Sol, símbolo espiritual en todas las culturas y símbolo de nuestro espíritu interior, de esos aspectos divinales que están dentro de la esencia, a los que hemos aludido tantas veces. Es una manera de acercarnos a esos principios anímicos.
De todas las runas vamos a comenzar con la runa Os, una runa que tiene dos posiciones, y que nos sirve para transmutar nuestras energías interiores.
Aquí os dejo una fotografía con las dos posiciones de la misma:
1.- En la primera posición, con los brazos a la izquierda, inhalamos.
2.- En la segunda abrimos la pierna derecha y colocamos los brazos en jarras, pronunciando el mantra TORN (hay que pronunciar cada letra en una sola inhalación).
En el siguiente enlace tenéis un vídeo donde se aprecia cómo hacerla, así como una práctica dirigida con ella. Ya sabéis cómo descargar todo esto.
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